JULIO 27

1824 El ministro Santiago Fernández, manda observar las Ordenanzas de la Armada Española de 1793 y 1802, en cuanto sean adaptables para el servicio de los bajeles de la Marina de Guerra, debiendo darse término a la distinción de juzgamientos concedida a los extranjeros.

1858 A fin de mejorar el funcionamiento de los buques y de que éstos estén dotados con los especialistas necesarios, el ministro de Marina, coronel Manuel García de la Huerta, indica al comandante general que los integrantes de los equipajes de línea “marineros, carboneros, fogoneros y otros, no pertenecen a tal o cual buque sino a la Marina Militar de la República”, cuyo depósito general era el pontón “Chile”.

1887 El presidente Balmaceda y el ministro de Hacienda, Agustín Edwards Ross, declaran la dinamita como incluida entre los “pertrechos de guerra” que enumera la Ordenanza de Aduanas.

1901 A raíz del accidente del transporte “Angamos”, que chocó en una roca en los canales de Chiloé, la Dirección General llama la atención de los comandantes que navegan en los mares y canales interiores al sur del paralelo 41°, de permanecer constantemente en el puente de gobierno.

1959 Créase la Clínica Dental Central de la Armada.

1973 En Santiago, es asesinado el edecán naval de la presidencia, capitán de navío Arturo Araya Peeters. Sus restos son despedidos por el comandante en jefe de la Armada, almirante Raúl Montero Cornejo, quien también fuera comandante del buque escuela “Esmeralda” VI cuando, en 1958, el teniente Araya cumplió la tarea de dirigir el entrenamiento del Curso de Guardiamarinas:

“El Comandante Araya zarpó en la medianoche como los navíos cuando emprenden sus largas travesías. No murió como él lo hubiese querido, en el puente de mando de un buque, pero sí tuvo la entereza del hombre de mar para enfrentar el peligro, resuelto y viril, dando la lección postrera de gallardía y entrega.

El oficial graduado en diciembre de 1946 el plantel del cerro Artillería junto a los guardiamarinas Guillermo Aldoney, Hernán Badiola, Jorge Emilio Cheyre, Jorge Hess, Tulio Rojas, Pablo Wunderlich y Claudio Hemmerdinger, cuyo nombre fue dado a una barcaza de la clase LST, un día expresó:

“Recuerda marino:
De las cubiertas regadas con tu sangre, brotarán la libertad y las glorias futuras de la patria”.