Juan de Dios Aldea Fonseca (1853-1879)

Nació en Chillán, en 1853. Hijo del profesor don José Manuel Aldea y doña Úrsula Fonseca. Su familia, de modesta condición económica, por ascendencia paterna poseía un parentesco cercano con el Ministro del Gobierno del General Bernardo O’Higgins Riquelme, don Juan Antonio Rodríguez Aldea, y padre del ilustre poeta chileno Luis Rodríguez Velasco.

El 1872, furtivamente se enroló como soldado voluntario en la Comisión de Enganche, enviada por el Batallón de Artillería de Marina, existente en Valparaíso, cuerpo que dependía de la Comandancia General de Marina. Permaneció en la Primera Compañía de ese Batallón hasta marzo de 1874 y, en abril, fue enviado en comisión a Valdivia. Entre 1874 y 1878 ascendió de soldado a Sargento 2°, cumpliendo comisiones en Magallanes, embarcado en la corbeta «Esmeralda» y en el Pontón «Thalaba».

Declarada la Guerra del Pacífico, es transbordado a la corbeta «Esmeralda», donde, el 21 de mayo de 1879, tiene una heroica participación en el Combate Naval de Iquique.

Aldea, cumpliendo fielmente con su deber, al darse la alarma del avistamiento del monitor «Huáscar» y la fragata blindada «Independencia, al toque de «generala» formó en el alcázar a sus 33 Artilleros de Marina que pronto rindieron honores a los pabellones patrios izados en las diferentes drizas de la corbeta, presentándoles armas y batiendo marchas con su corneta y tambor.

Cerca de la 08:00 horas, al toque de «atención» del Grumete Gaspar Cabrales, el Sargento 2º de Artillería de Marina, Juan de Dios Aldea Fonseca, se colocó en su puesto de combate, junto a su Comandante, el Capitán de Fragata Arturo Prat Chacón, ya que su deber era protegerlo durante el combate. Allí escuchó la inmortal arenga de Prat.

Al primer espolonazo del «Huáscar», acompañó a su Comandante en su heroico abordaje a la nave enemiga. Mientras Arturo Prat caía muerto producto de la metralla enemiga, su fiel subalterno sufrió graves heridas, que lo mantuvieron agónico hasta el 24 de mayo, donde muere.

La heroica muerte de Juan de Dios Aldea Fonseca ha quedado para siempre perpetuada en el nombre de una de las unidades de la Armada y de numerosas calles de las ciudades de nuestro país. Sus restos reposan en la Cripta del Monumento a los Héroes de Iquique en Valparaíso.