1817 La goleta de 50 toneladas armada en Constitución “Fortunata” y el bergantín “Águila”, aparejan y salen al encuentro de la “Venganza”, fragata que evade el asalto de las naves patriotas, corriendo la misma suerte durante los siguientes años. Será capturada en marzo de 1822 por Cochrane, que la entregará finalmente al gobierno de Guayaquil.

1831 José Tomás Ramos obtiene patente de navegación comercial por el bergantín de 230 toneladas “La Revancha”, que arma con el portugués Francisco Alvares, dueño de la hacienda Viña del Mar y suegro de José Francisco Vergara que figura entre los primeros armadores de naves chilenas.

1863 En vista de la irregular práctica observada desde 1856 en la sucesión de mando de la Marina, el Gobierno instruye al intendente de Valparaíso que, aun cuando dicho cargo y el de comandante general “se encuentran reunidos en un solo funcionario por declaración expresa del presidente de la república, reconocen un orden de sucesión distinto en caso de ausencia o muerte del propietario”, tal como lo señala la Ordenanza de la Armada Española de 1793, entonces vigente en Chile.

1865 Para reponer víveres y carbón perdidos a raíz del hundimiento del pontón “Chile”, el 17 de septiembre por el almirante Pareja arribado en la fragata “Villa de Madrid” a Valparaíso, el Gobierno instruye al comandante del pontón que solicite los correspondientes abonos.

1891 Al establecer un sistema de provisión de artículos navales y víveres destinados al consumo de la institución, la Junta de Gobierno fija una ración de Armada de, entre otros víveres: “115 gramos de charqui; 150 de frejoles, 28 de cacao, 20 de arroz, 20 de café y 75 de azúcar…, la carne deberá ser fresca, con toda su gordura y bien desengrasada. El cacao será en grano, sano y de buen sabor, de la clase llamada en el comercio Balao, debiendo ser tres panes por cada ración de cuatrocientos sesenta gramos”.