1862 Cuando se ejecutan en su interior trabajos de acondicionamiento del vapor británico “Clodia”, debido a la pérdida de estabilidad de la nave, el dique de madera construido en 1853 por Nicolás Tiedge se hunde hasta desaparecer de la superficie.
En los astilleros que el constructor naval Jean Duprat mantenía instalado en la punta del mismo nombre desde 1845, muy pronto se inició la construcción de un nuevo dique flotante.

1880 Asalto y Toma del Morro de Arica.
En una “acción típicamente de infantería, en la cual se impuso el valor personal sobre el poder de las armas de fuego”, el coronel Pedro Lagos, comandante de la división chilena compuesta por los regimientos “Lautaro”, “Primero”, “Tercero” y “Cuarto de Línea”, conquistó los fuertes del Morro y los de la playa, quedando el puerto de Arica en poder de los chilenos.
Comenzado el ataque a las seis de la mañana, después de que el día anterior la escuadra realizara un ataque de artillería sobre las fortificaciones emplazadas en diversos sitios de la ciudad, en carta privada el comandante Patricio Lynch señala que a las 06.35 estalló la primera mina en uno de los fuertes asaltados, y a las 07.15 dos en las baterías “San José” y “Santa Rosa”, siendo las siete y media cuando la ciudad estaba en poder de los chilenos Después del combate, a las siete tres cuartos el blindado “Manco Capac” abrió sus válvulas y se fue a pique, resolviendo su comandante Sánchez Lagomarsino entregarse prisionero con su tripulación a bordo del vapor “Itata”.
Las bajas chilenas fueron 473 entre muertos y heridos; los peruanos tuvieron más de 700 muertos y heridos y dejaron en el campo 1.318 prisioneros. Por su trascendencia, y el gran valor demostrado por los soldados que con destacado espíritu combativo en menos de una hora escalaron las abruptas laderas sembradas de minas y explosivos del cerro ariqueño, el Ejército lo instituyó como “Día de la Infantería”.
Al comentar la vida del teniente coronel Juan José San Martín, comandante del “Cuarto de Línea”, Vicuña Mackenna dirá que el capitán de cazadores del “Cuarto” durante doce años, era propiamente los que los soldados franceses llaman “un enfant de la trouppe”, es decir un hijo de los cuarteles, un centinela de los campamentos, un héroe de todas las batallas, dejando constancia que el militar cuyo nombre luce el regimiento “Rancagua” de Arica, antes de 1879 estuvo presente en las campañas de la Araucanía, Traiguén y Cautín, lugares donde recibió heridas de guerra.
Dicho regimiento de guarnición en Arica se asocia con la Armada de Chile en compartir el mismo lema: “Vencer o Morir”

1906 Se hunde la cañonera “Magallanes” en Corral.