1813 Captura de la fragata “Thomas” en Tomé.
Tras apoderarse de la nave también conocida como “Santo Domingo de Guzmán”, el capitán Ramón Freire y el teniente Nicolás García obtienen un botín de 100 mil pesos en valores y monedas, además de armamento y pertrechos provenientes de Callao destinados a las tropas de Pareja. Después de apoderarse del dinero, armamento y pertrechos, en vez de usarlos para armar una fuerza naval, los patriotas venden en remate la fragata y el mercante hispano “San José”, capturado anteriormente.

1880 De las dos lanchas torpedos que los peruanos tienen en Arica, una de ellas huye hacia el norte siendo perseguida por el “Almirante Cochrane” y el “Loa”. Antes de ser alcanzada por este último luego que el blindado, a la altura del río Juan Díaz, resuelva suspender la persecución, su dotación decide vararla en Punta Coles y hacerla volar con dinamita. Una vez en tierra, los marinos serán capturados por un destacamento del “Caupolicán”.
Ocurrido la noche del 24 al 25 de mayo en las cercanías del dique de Callao, un encuentro entre las torpederas chilenas “Janequeo” II y “Guacolda” y unidades peruanas, durante su desarrollo una granada de estas últimas produjo una abertura y el posterior hundimiento voluntario de la primera torpedera chilena. La acción generada la noche del 8 de junio siguiente con participación del buzo del blindado “Blanco”, José Sobenes, dio origen a la creación de la Especialidad de Buceo de Salvataje de la Armada.

1880 En la Cámara de Diputados se formula un “voto de admiración y de gracias a los jefes, oficiales y soldados vencedores de Tacna y de Arica, y les anuncia que la opinión pública de Chile les señala a Lima como corona y término de sus heroicos sacrificios”.

1891 Poco más de un mes después de haber organizado una Columna de Marineros, dividida en tres seccciones y mandada por un teniente a la que el 21 de abril se le dispuso como base el transporte “Isidora Cousiño”, la Junta de Gobierno de Iquique crea una Columna de Aspirantes, cuerpo a cuya cabeza designa un jefe del grado de sargento mayor, al que asigna la misión de:
“Proporcionar a los voluntarios que se incorporan al Ejército Congresista, un campo de preparación donde puedan adquirir los conocimientos necesarios para el buen desempeño del servicio militar”.
A cada aspirante se le asigna el sueldo de cincuenta pesos mensuales.